viernes, 25 de abril de 2014

Reflexion: El Maestro y el Escorpion



Reflexión: El maestro y el escorpión

http://youtu.be/f6nRVA4ARmc



"El maestro y el escorpión"

Por el sendero de un hermoso bosque, el viejo maestro caminaba en silencio junto a su joven discípulo. Al llegar a un riachuelo, divisaron cerca de la orilla a un escorpión que había caído al agua y luchaba por su vida. El maestro se acercó, alargó su brazo y tomó el animal para sacarlo del agua, pero de inmediato el escorpión lo picó. El dolor fue grande y al sacudir la mano, el maestro dejó caer al escorpión al agua.

Sin pensarlo dos veces, el maestro se volvió sumergir su mano en el agua para salvar al alacrán, pero una vez más el alacrán lo picó y luego cayó al riachuelo. Tras frotarse la segunda herida, el maestro se agachó nuevamente, pero justo antes de introducir su mano en el agua, su discípulo lo detuvo tomándolo por el hombro.

- ¡Pero maestro, no vuelva a agarrar al alacrán, lo va a picar otra vez!, además, ¿cuál es su empeño en salvar a ese animal tan malvado?

- Querido amigo – respondió el maestro con voz calmada – El alacrán me ha picado porque eso está en su naturaleza. Sin importar cuales sean las circunstancias, su instinto será siempre el de defenderse picando a cualquier otro animal que se le acerque. En cambio, yo estoy llamado a amar a la naturaleza, por lo tanto a tratar de salvarlo, porque eso está en mi naturaleza. Muy mal haría yo en dejarme influenciar por su naturaleza, dejando la mía de lado; en renunciar a hacer el bien solamente porque a otro no le gusta o no está de acuerdo; en comportarme de maneras distintas según las circunstancias en lugar de ser siempre auténtico.

El maestro volvió a agacharse, tomó una hoja que pasaba flotando y con ella levantó por tercera vez al alacrán para salvarle la vida.


viernes, 18 de abril de 2014

Perdon Señor.

Te pido perdón Señor por todas las veces que peque y por las que seguro me quedan.
Yo se que cada vez que lo hago Tu Sangras y sufres mas por mi en la Cruz.
Ayudanos Señor a ser cada dia mas Santos y a irradiar tu Amor.Para que asi hagamos tu carga mas ligera.
Concedenos Señor esta Gracia.Te lo pido Señor en tu Nombre y bajo la intercesión de tu Madre la Virgen Maria.
Amen!!


CONFÍO Y NECESITO DE DIOS

 
Señor, siento la necesidad de decirte
que confío en Ti en todo momento!
 
Sé que nunca dejas de pensarme,
de amarme y de preocuparte por mí!
 
Tú Palabra es fuente de sabiduría,
me enseña, me corrige y me educa en el bien;
me ayuda a adquirir la madurez y el juicio.
 
Señor! suscita en mí el deseo de ser mejor,
que con mis palabras, con mis actitudes de amor
y respeto, haga conocer a los demás
tus enseñanzas, para que seas
para todos Camino, Verdad, y Vida.
 
Corazón de Jesús, por medio de María,
nuestra madre y madre de la iglesia,
yo me consagro a ti,
y contigo me ofrezco a Dios Padre.
 
En tu santo sacrificio del altar,
ofrezco también mis oraciones
trabajos, sufrimientos y alegrías,
para que en el mundo se haga tu voluntad.
 
Espíritu de Dios lléname de tu Gran Amor,
Jesús de Nazaret Creo en Ti,
Espero en Ti y Confío en Ti.


miércoles, 16 de abril de 2014

LA TIENDA DEL CIELO



Espero les guste la visita a esta tienda que les propongo aquí:

LA TIENDA DEL CIELO


Me causo curiosidad y me acerqué. La puerta estaba abierta, bueno realmente se abrió poco a poco, lentamente y cuando me di cuenta ya estaba adentro. Vi muchos ángeles parados por todas partes, uno de ellos me entregó una cesta y me dijo: "Ten, compra con cuidado todo lo que necesites y lo que no puedas ahora te lo llevaras después, eso si solo puedes comprar para ti"

Comencé a caminar por esta enorme y bella tienda y lo primero que compré fue Paciencia y Amor, estaban en la misma fila y mas abajo en el mismo pasillo encontré Comprensión... Pues eso se necesita muy seguido. Encontré el Triunfo, al lado de la Perseverancia y no dude en tomar dos kilos de cada una.

La Humildad estaba en la parte de arriba del estante y eché una caja en mi cesta, pues la podría utilizar después del triunfo. También compré dos bolsas de Fe, que venía junto con la Oración. Más adelante encontré la caja de Disculpa, bellamente diseñada y eché en mi cesta dos cajas.

Al doblar el pasillo me pare a comprar Fuerza y Coraje, para utilizarlo sin duda en la carretera de la vida. En el ultimo pasillo vi la Serenidad, el Valor y la Sabiduría. Los tres por el precio de uno y tenían estas instrucciones: "Utilizar la serenidad para aceptar las cosas que no se pueden cambiar, el valor para cambiar las que se puedan y la sabiduría para distinguir la diferencia..." ¿Cómo iba a dejar pasar esa oferta? La Paz y la Felicidad, las daban gratis con la compra de los demás artículos.

Llegue a la caja y también me atendió un ángel y le pregunte: "¿Cuanto le debo?. El me sonrió y me contesto: "Lleva tu cesta donde quiera que vayas". De nuevo le pregunte "Si... pero, ¿cuanto le debo?. El otra vez me contesto sonriendo: "No te preocupes Jesús ya pagó tu deuda hace mucho tiempo".

NOTA: Quiero que sepas que puedo darte la dirección de esta tienda, y si vas no te arrepentirás ya que tendrás el gusto de conocer a aquel que pagó tu deuda, quien te ama y dio la vida por ti.

P.D: Léelo cada vez que necesites comprar algunos de los elementos que venden en esta tienda.

martes, 25 de septiembre de 2012

ORACIONES A LOS ANGELES

ORACIONES A LOS ÁNGELES


¿Puedo rezarle a mi ángel custodio? ¿Puedo rezar a otros ángeles? ...sí que puedes.

AL ÁNGEL CUSTODIO

Ángel de mi Guarda, mi dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día, hasta que me entregues en los brazos de María. No me dejes solo, que me perdería. Ángel de Dios, Ángel de mi guarda, ilumíname, guárdame, y gobiérname este día. Amén

A SAN MIGUEL ARCÁNGEL

San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla, sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes; y tú, Príncipe de la milicia celestial, arroja al infierno, con el divino poder, a Satanás y a los demás espíritus malignos, que vagan por el mundo para la perdición de las almas. Amén

BENDICIÓN PARA EL VIAJE

Por la intercesión de Santa María, que tenga (tengamos, etc.) un buen viaje: que el Señor esté en mi (nuestro) camino, y su Ángel me acompañe (y sus Ángeles nos acompañen). En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amé

ORACIÓN A LOS SANTOS ÁNGELES CUSTODIOS DE LOS SAGRARIOS

"Oh Espíritus Angélicos que custodiáis nuestros Tabernáculos, donde reposa la prenda adorable de la Sagrada Eucaristía, defendedla de las profanaciones y conservadla a nuestro amor". "Dios, Padre misericordioso, que en tu providencia inefable te has dignado enviar para nuestra guarda a tus Santos Ángeles; concede a quienes te suplican ser siempre defendidos por su protección y gozar eternamente de su compañía. Por nuestro Señor Jesucristo…"

(Colecta de la Misa de los Santos Ángeles Custodios)

PETICIÓN A DIOS

"Dios, Padre del Cielo, que con admirable sabiduría, distribuyes los ministerios de los Ángeles y de los hombres; te pedimos que nuestra vida sea protegida en la tierra, por quienes te asisten siempre en el Cielo. Por nuestro Señor Jesucristo…"

(Colecta de la Misa de los Santos Arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael)

Eclesiástico 2: Paciencia y confianza

Eclesiástico 2

Dios Habla Hoy (DHH)

Paciencia y confianza

2 Hijo mío, si tratas de servir al Señor,
prepárate para la prueba.
2 Fortalece tu voluntad y sé valiente,
para no acobardarte cuando llegue la calamidad.
3 Aférrate al Señor, y no te apartes de él;
así, al final tendrás prosperidad.
4 Acepta todo lo que te venga,
y sé paciente si la vida te trae sufrimientos.
5 Porque el valor del oro se prueba en el fuego,
y el valor de los hombres en el horno del sufrimiento.
6 Confía en Dios, y él te ayudará;
procede rectamente y espera en él.
7 Ustedes, los que honran al Señor, confíen en su misericordia;
no se desvíen del camino recto, para no caer.
8 Los que honran al Señor, confíen en él,
y no quedarán sin recompensa.
9 Los que honran al Señor, esperen la prosperidad,
la felicidad eterna y el amor de Dios.
10 Fíjense en lo que sucedió en otros tiempos:
nadie que confiara en el Señor se vio decepcionado;
nadie que lo honrara fielmente se vio abandonado;
a todos los que lo invocaron, él los escuchó.
11 Porque el Señor es tierno y compasivo,
perdona los pecados y salva en tiempo de aflicción.
12 Pero, ¡ay de los corazones cobardes y las manos perezosas!
¡Ay de los pecadores que llevan una vida doble!
13 ¡Ay de los corazones débiles, que no tienen confianza!
¡Dios no los protegerá!
14 ¡Ay de los que no saben soportar con paciencia!
¿Qué harán cuando el Señor los ponga a prueba?
15 Los que honran al Señor obedecen lo que él ordena;
aquellos que le aman hacen lo que él quiere.
16 Los que honran al Señor tratan de hacer lo que a él le agrada;
aquellos que le aman cumplen con gusto su ley.
17 Los que honran al Señor están siempre dispuestos
a humillarse delante de él.
18 Pongámonos en las manos del Señor,
y no en las manos de los hombres;
porque el amor de Dios
es igual a su grandeza.
 
 

sábado, 18 de agosto de 2012

ORACION DE SANACIÓN POR UN NIÑO ENFERMO (P. José Luis Aguilar)


ORACION DE SANACIÓN POR UN NIÑO ENFERMO (P. José Luis Aguilar)...pedimos por bebes y niños enfermos....ten piedad Señor!!!!...rogamos a todos unirnos en oraciòn...gracias!!!!

"Fue, pues, Jesús otra vez a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Había en Cafarnaúm un oficial del rey, cuyo hijo estaba enfermo. Cuando oyó aquel que Jesús había llegado de Judea a Galilea, fue a él y l
e rogó que descendiera y sanara a su hijo, que estaba a punto de morir.
Entonces Jesús le dijo: Si no veis señales y prodigios, no creeréis. El oficial del rey le dijo: “Señor, desciende antes que mi hijo muera”. Jesús le dijo: “Vete, tu hijo vive”. El hombre creyó la palabra que Jesús le dijo, y se fue.
Cuando ya él descendía, sus siervos salieron a recibirlo, y le informaron diciendo: “Tu hijo vive”. Entonces él les preguntó a qué hora había comenzado a mejorar. Le dijeron: “Ayer, a la hora séptima, se le pasó la fiebre. El padre entonces entendió que aquella era la hora en que Jesús le había dicho: «Tu hijo vive». Y creyó él con toda su casa. (Jn 4, 46-53)


(Un momento de silencio para que la Palabra de Dios con su poder penetre en su corazón y se sienta movido a un acto de fe carismática: Dios Puede hacerlo otra vez)

Amado Señor, tú conoces el corazón de tus hijos, y no te quedas indiferente ante el pobre que te suplica. Tú sabes lo que nos aflige el bienestar de nuestros niños, tu comprender la preocupación de los papás ante la enfermedad de alguno de sus hijos. Vengo hoy, como el funcionario real del Evangelio, a pedirte que desciendas y sanes a nuestro niño/a (nombre con fe al niño/a enfermo por quien se está orando de manera especial y el mal que lo aqueja).

Aún desde la preocupación que nos causa su enfermedad, desde el dolor y el desconcierto, si esta enfermedad está dentro de lo que tu permites, aceptamos este momento como ocasión de purificación, de abandono en tus manos, de ofrecimiento generoso de nuestras vidas. Aceptamos este momento como una ocasión para unirnos desde el sufrimiento a los dolores de Cristo por la salvación del mundo (Colosenses 1, 24) (Tómese unos minutos y, en calma, que su corazón se una a lo que acaba de decir con sus labios: "con este sufrimiento, me uno, Señor, a tu pasión...")

Ahora, Señor, a ti que quieres que tengamos vida en abundancia, te pido que por el poder del misterio de tu infancia y tu vida oculta en el hogar de Nazaret, sanes al niño/a a quien tú conoces y amas. Cuida de su cuerpito y de su alma. Pasa tu mano sanadora sobre él para que sienta tu alivio, tus cuidados y se restablezca prontamente, según tu voluntad.

Tú, que recibiste los amorosos cuidados de María y José, consuela y reanima a su papá y a su mamá, no dejes que caigan en la desesperación, en la duda, en la depresión, sino que desde su dolor y preocupación recurran a ti como fuente de verdadera, plena, y duradera sanación del cuerpo y del alma.
Te presentamos el lugar donde se encuentra el niño, reviste ese sitio con tu fuerza y gracia. Aleja de allí todo lo que, material o espiritualmente, puedan ser un obstáculo para la pronta recuperación.
Te presentamos los profesionales médicos que atienden al niño, revístelos con tu sabiduría, ilumínalos para que logren dar con acierto en el diagnóstico y encuentren la medicación y tratamiento indicado. Tómalos como instrumentos de tu sanación.

María, madre de Jesús y madre nuestra, que con esmero y constancia, cuidabas de tu niño, mira el corazón de la madre e infúndele confianza, para que también ella, como tu, pueda ver crecer a su hijo en estatura, sabiduría y gracia, delante de Dios y de los hombres.

Querido San José, tú que fuiste el protector de la Sagrada Familia, y la defendiste de todos los peligros y hasta de la muerte segura en la persecución de Herodes, te presento al papá de esta criatura, intercede ante tu amado Hijo Jesús, para que logre mantenerse fuerte aún en el dolor y la preocupación. Que logre conseguir los medios necesarios para la buena atención de su hijo/a. ayúdalo a no decaer y a mantenerse lúcido a la voluntad de Dios.

Señor, tu dijiste que creyéramos que ya hemos obtenido lo que te pedimos con fe en oración, ahora levanto mi voz y mis brazos para darte gracias por la salud que recibirá este niño por el poder de tu amor que escucha esta oración confiada. Reconocemos que ya estás actuando y sanando. Como el funcionario del Evangelio, nosotros también reconoceremos que es en este mismo momento que estas restableciendo salud y bienestar. Te alabo en fe. Te reconozco Señor y Salvador de nuestras vidas, sin ti estamos perdidos. Te amamos Señor y reconocemos tu grandeza. A ti la gloria por los siglos sin fin. Amén.
(Padrenuestro, Ave María, Gloria)